Del más ardiente ardid
el color de tus pupilas.
Através de ellas
incubé júbilo,
regocijantes tramas,
sellé estigmas,
deslicé la vida.
De la más astuta farsa
el matiz de tus pupilas.
No quise atender
trágicas vislumbres:
mi soledad repleta
de abortos y residuos.
La nostalgia inscrita,
su denso abismo,
como mancha de sangre
restituyéndose giratoria.
4 comments:
muy...muy...muy...
Wilma:
Compatriota, compañera de ruta, ¿de Los Vilos? me encanta ese lugar lo he visitado un par de oportunidades. Agradezco tu comentario, somos tan pocos chilenos bloggeros, que disfruto cuando aparece alguno en mis letras, desde ya, cuentas con una nueva amiga y seguidora que te leerá con cariño y respeto...
Tu poema rezuma nostalgia y un dejo de tristeza, es cierto, existen ojos falsos, más bien corazones acres que nos mienten con miradas hábiles y seductoras.
Un besito para ti.
me metí en este "ojo" esta vez. ¡vaya el dueño de estos!
Líricos y velados reproches son los que le brindas...y de nuevo, me quedó pensando en tus formas escriturales.........esos comienzos de encarar directo y claro, y luego, ese sumergirse en el interior a traves de un lenguaje tan personal, que ya el aludido pasa a ser segundo y tercer plano.
Me quedo pensando aquello......
Estupendo, amiga. Beso
Post a Comment